Los increíbles beneficios de viajar para los niños

Viajar aporta una de los mayores placeres del mundo: conocer nuevas culturas, nuevos idiomas, nuevas maneras de ver la vida y de pensar, en definitiva, una nueva manera de interpretar el mundo ¿por qué no disfrutarlo con los niños?

Viajar aporta más beneficios a los niños de los que puedas pensar, y vivencias familiares difíciles de olvidar. No hace falta que tengas que atravesar parte del globo para vivir nuevas experiencias, simplemente basta con cambiar de paisaje para que los beneficios empiecen a tener efecto en tus hijos.

Te contamos 12 beneficios de viajar para los niños.

Los beneficios de viajar para los niños

Antes de tener hijos solía recorrer el mundo en compañía de mi pareja y de mi cámara de fotos. Mi profesión era hacer reportajes de viajes y más que un trabajo era una auténtica pasión.

Viajar me abrió las puertas a un planeta que solo conocía a través de los documentales, me hizo descubrir un nuevo mundo y también me enseñó a mirarme a mí misma y a ser más consciente de la realidad que me rodeaba.

Cuando nacieron mis hijas tuve la certeza de que los viajes no iban a ser lo mismo. Salir de casa a dar un paseo era una odisea con todas las cosas con las que iba cargada: pañales, toallitas, ropa de recambio, biberones… así que mucho menos me planteaba salir de viaje. Sin embargo, más tarde descubrí que, no necesitaba tantas cosas como pensaba, y que el ingenio se agudiza cuando uno lleva poco equipaje; y para mi sorpresa, también descubrí que los viajes ya no eran como antes, sino muy diferentes, ahora disfrutaba de los viajes a través de los ojos inocentes y curiosos de mis hijas; y realmente me divierten mucho más.

Son tantas las aportaciones que les da viajar que se ha convertido en una de nuestras actividades favoritas en familia. Pero lo mejor, es que su inocencia y ganas de descubrir el mundo es tan grande que basta con salir de nuestro barrio para que se sorprendan a cada paso.

12 beneficios de viajar para los niños

1- Se desarrollan social y emocionalmente y tienen una nueva actitud ante la vida y las demás personas.

2- Adquieren nuevos valores y habilidades sociales.

3- Pierden el miedo a lo desconocido al salid de su zona de conford. Conocen nuevas culturas, idiomas y fomenta su capacidad de adaptación a otros medios.

4- Fomenta el respeto hacia otras personas, les enseña a ser más tolerantes, flexibles, y a tener paciencia.

5- Les enseña a vivir a un ritmo más lento y disfrutando de los pequeños placeres del mundo como un amanecer, un paisaje, hablar con alguien desconocido, y a disfrutar del propio camino.

6- Fomenta su autonomía y maduración, además de la capacidad de observación y de reflexión ante la vida.

7- Aprenden geografía, historia, idiomas, gastronomía… de una manera más divertida y que perdura para siempre en la memoria.

8- Aprenden a ser realistas, a ver que lo nuestro no es siempre lo mejor, y a valorar lo que tienen.

9- Les ayuda a perder la vergüenza y a resolver situaciones comprometidas.

10- Les enseña que se puede vivir mucho más intensamente sin los dispositivos electrónicos, sin la televisión y sin tablets ni videojuegos.

11- Les ayuda a confiar en la gente y a sonreír más.

12- Les empuja a romper mitos y prejuicios, y a sorprenderse con pequeñas cosas.

 Pero sobre todo, refuerza nuestros lazos familiares y dejan una huella imborrable en su memoria.